Es un fenómeno porque arrasó con dos maquinarias electorales que tenían el ejercicio del poder a su favor, y a más de uno sorprende su llegada a la política. Roberta Zambrano Ortiz, abogada de profesión, de 37 años de edad, es un personaje público vigente.
Una mujer que en la primera candidatura de su vida logra en dos meses de campaña un respaldo numeroso del electorado, es motivo de un análisis profundo, porque aún no llegando a la Alcaldía de Esmeraldas, (lo sabremos tras el escrutinio del último voto) es la única ganadora en estas elecciones.
Lo que dice, cree, piensa y siente la gente, muchas veces, se refleja en las urnas; y es a esa manifestación a la que hay que hacerle una lectura entre líneas, más allá de una posición política, de simpatías o rechazos.
Preguntarnos, por ejemplo, ¿Qué quiere verdaderamente la población de la ciudad y el cantón Esmeraldas? ¿Qué le faltó hacer o en qué falló una administración municipal de ocho años que siempre habló de cambios? ¿Por qué eligieron esa opción y no otra, será un voto de rechazo? ¿No teme este pueblo volver a un pasado donde no se realizaron las obras más urgentes, a un pasado de abandono total? Y tantas otras preguntas que cada ciudadano, desde cualquier posición, se hará.
Puede ser también un voto de confianza a las mujeres que cada día demuestran ser buenas administradoras, responsables, organizadas, pero sobre todo valientes y honestas. Mujeres dueñas de una fortaleza que jamás les hace perder su sensibilidad.
De cualquier manera, hay que volver los ojos al ciudadano común. Comprender sus necesidades y aspiraciones, su entorno y su calidad de vida, comprender su educación y formación para contribuir siempre a mejorar en todos los aspectos, por el bien común.
No hay comentarios:
Publicar un comentario