ATEMORIZAR A LOS MEDIOS

Atentado a la libertad de expresión
Los equipos de transmisión y antenas de Telecosta canal 6 de Esmeraldas y de Radio Gaviota, instalados en el sector demonizado como El Cerro El Gatazo, fueron atacados la mañana del martes 7 de abril. Tres sujetos aun no identificados lanzaron ácido sulfúrico en las instalaciones.
El atentado que dejó pérdidas por alrededor de 200 mil dólares, según versión de sus propietarios intenta atemorizarlos y callar su voz que constantemente denuncia la falta de obras y de atención a la población esmeraldeña por parte de las autoridades de turno.
Este hecho que ya fue rechazado públicamente por los ciudadanos esmeraldeños, por las organizaciones de periodistas y demás profesionales, se da precisamente en plena campaña electoral, a tan solo 19 días de las elecciones generales, cuando partidos políticos y determinados candidatos intentan identificarse con los medios de comunicación o periodistas.
Juan Endara Demera, uno de los ejecutivos del canal, sin realizar acusaciones concretas dijo que todo cursa por una represalia de cierto partido político que desde el medio de comunicación ha sido criticado por la ciudadanía.
Periodismo y política. Se unen y se agraden. Como dice el periodista ecuatoriano Rubén Darío Buitrón ¿qué sentido tiene esa actitud?. Si la única obligación de ambos es colectiva, no individual. Ambos se deben al pueblo, a la gente y deben contribuir a la disolución de los problemas sociales.
En Esmeraldas, ¿la ubicación de los periodistas y medios de comunicación es en una u otra esquina, recibiendo o lanzando bombardeos de cada lado y no en el centro como punto de convergencia, de disolución, de confluencia, que permita diversidad y pluralismo en la información que emiten a diario?.
La misión de los medios de comunicación es presentar escenarios, realidades, muchísimos y variados puntos de vistas para que al final sea la comunidad, el pueblo sabio quien emita un criterio y asuma una posición clara y pensada. Solo basta con dar las herramientas a la sociedad para que tome sus decisiones.
Si en este camino los medios revelan hechos que disgustan a individuos u organizaciones políticas o sociales no debe preocuparles. Pero se convierte en una situación grave, extrema y condenable cuando se atenta contra un medio de comunicación o los periodistas. Cuando la violencia es la táctica del miedo. Cuando con agresiones se intenta volcar el curso de una realidad.